Hace unos cuantos años al escuchar “Somewhere Only We Know”, una de las canciones más conocidas de la agrupación inglesa Keane, supe que para hacer buena música no se necesita ser un virtuoso como músico, se necesita tener mucha creatividad. Me dejó asombrado las atmósferas que tenían, el piano de Tim Rice Oxley llenaba cada uno de los vacíos que se tenía al presidir de una guitarra, la verdad era muy gratificante escuchar algo nuevo de calidad.
Desde su primer álbum comercial llamado “Hopes and Fear” (2004), hasta sus predecesores “Under the Iron Sea” (2006) y su obra más preciada “Perfect Symmetry”, Rice quien aparte de tocar el piano es el compositor, nos deleitaba con su pop modernista, la voz de Tom Chaplin nos envolvía en un misterio total, era realmente fascinante. Quienes fuimos al concierto ofrecido en Bogotá en Marzo de 2009, comprobamos que Keane era un respiro para el rock, que era algo novedoso, creativo y ante todo muy bien hecho.
En noviembre de 2010 salió a flote su último trabajo titulado “Night Train” que es un EP compuesto por 8 cortes, los cuales fueron compuestos y grabados en la gira de “Perfect Symmetry”. El nombre del EP, surge del modo de transporte preferido por la banda durante su gira. Al escuchar la primera canción de este trabajo noté que era el intro que utilizaban en sus conciertos en los últimos años, es totalmente instrumental y Rice saca ventaje de toda la tecnología posible para saturar por completo el ambiente, algo que en mi opinión aburre.
Se incluyen temas como “Looking back” y “Stop for a minute” (primer single), con la colaboración del rapero somalí/canadiense K'Naan. "Pienso que esos temas nos muestra en una vía completamente distinta", comenta el vocalista Tom Chaplin; de aquí es donde me pregunto que paso con la dulzura y el buen trato por los ambientes de la banda, no me explico como pudieron cambiar tanto, mas allá de la evolución normal que tienen todos los artistas, pero la verdad me aburre por completo este sonido.
Mientras avanzo escuchando todo el disco encuentro canciones vacías, con muchos arreglos musicales, guitarras de fondo, trabajo con bajos y efectos, pero la verdad no se puede describir hacia donde nos pretende conducir Keane. Leyendo algunas críticas me impresiona como las personas alaban ciertas cambios en el sonido de la banda, creo que en vez de cambiar nos quieren impresionar por su sonido mas elaborado, pero esos sonidos tan dispuestos en muchas ocasiones llegan hacer realmente aburridos, como el corte número seis llamado “Your Love” donde se siente que iban en un tren sin retorno con esta canción, cuando la crearon.
Seguiré escuchando todo lo nuevo, viejo, bueno malo de Keane, porque me gusta, porque se deja manejar, porque creo que es una muy buena opción para relajarse y escuchar algo novedoso; sólo espero que su próximo álbum sea más coherentes con lo que hacen, que hagan más simplificadas las cosas por que hay que recordar que mayor cantidad nunca indicará mayor calidad.
David González.